Cuando somos padres, llega un momento en la vida de nuestro bebé, en el que empieza a moverse y a sentir curiosidad por las cosas que le rodean, y es entonces cuando nos empezamos a preguntar qué tipo de juegos son los más adecuados para estimular el desarrollo de nuestro hijo.

Hemos de entender que el juego es la principal fuente de ocio y entretenimiento del bebé, pero también, es la forma que tienen de descubrir todo lo que les rodea y aprender nuevas destrezas. Por lo que es muy importante, aprovechar ese momento, para estimular su su mente.

Juegos para estimular el desarrollo del bebé:

Aunque existen muchos juegos para estimular el desarrollo del bebé, vamos a proponeros algunos, que te seran realmente fáciles de poner en práctica. Estos juegos están indicados principalmente para niños entre 12 y 36 meses (de 1 a 3 años).

· Palmas, palmitas:
Sitúate delante de tu bebé y canta la canción de “Palmas, palmitas” choca sus manos con las tuyas para que el juego sea más divertido. Si aún no controla sus manos puedes ayudarlo, tomando sus manos entre las tuyas. Si tu bebé tiene más coordinación, puedes cambiar el juego, variando de mano o chocándolas cambiando el orden.
Con este juego lo que se pretende es estimular la coordinación entre manos y ojos. Y al mismo tiempo, ejercitará su memoria al intentar recordar el siguiente movimiento.

·Un dedito, dos deditos…:
Existe un juego muy básico que ya conocían nuestras abuelas, y es el de cantar la canción de los dedos mientras indicamos cuál de ellos llevaba a cabo una acción, del tipo: este dedito se encontró un huevo,….
Lo que se pretende con este sencillo juego, es divertir al niño, mientras va asimilando su cuerpo, y poco a poco conociendo los números.

·Construcciones:
Uno de los juegos que más les gusta a los pequeños de la casa es el de jugar a hacer torres con piezas de construcción. Con este juego los niños trabajan sus habilidades motoras, tanto finas como gruesas al intentar apilar los objetos. Sino dispones de un juego de construcción, puedes usar otros materiales, como cajas pequeñas o juguetes que sean seguros para el bebé. Y una vez que haya acabado la torre, puedes derribarla, verás como se ríe.

·Agrupar objetos:
En los primeros años de vida, los niños tienen la obsesión de agrupar sus cosas siguiendo sus propios criterios, aunque en un principio pueda ser una obsesión, no lo es para nada, y puede convertirse en un juego muy divertido si utilizar juguetes de diferentes tamaños y colores. Juega con tu hijo para que vaya aprendiendo los conceptos de grande y pequeño, colores o números.

·Puzles o paneles con formas:
Uno de los primeros juguetes que se les suele regalar a los más pequeños es el que consiste en encajar determinadas piezas en los huecos correspondientes. Los objetos suelen tener diferentes tamaños y colores para que se encajen en el lugar correspondiente, si el ángulo no es el correcto, la pieza no entrará en su hueco.
Al igual que con la construcción de torres, con los paneles de forma lo que se pretende es trabajar las habilidades motoras finas y gruesas, y adquirir destreza con las manos.

Con cualquiera de estos juegos, puedes pasar un rato divertido y agradable con tu bebé, pero recuerda que nunca deberás obligar al niño a realizar un determinado juego, pues de esta forma, sólo conseguirás que llegue a odiarlo. Si prefiere jugar a otra cosa o pasar el rato con sus muñecos, no te preocupes, en otro momento encontraréis un rato para jugar juntos.