El desayuno es una de las comidas más importantes del día. Después de las horas de ayuno nocturno, el desayuno es la primera comida del día, por lo que nos debe aportar las condiciones favorables para un mayor rendimiento físico e intelectual. La ración del desayuno contribuye de forma vital a cubrir las necesidades diarias de vitaminas y minerales, entre los que destacan: calcio, zinc, magnesio y vitaminas B6 entre otros.

Además que, un desayuno adecuado participa en un reparto de alimentos diario más equilibrado, y con menos tentempiés, bollería u otros alimentos considerados «extras», que debemos evitar en la medida de lo posible.