Las pipas de girasol están consideradas, en algunos países, como comida para pájaros, periquitos o loros, en otros, como poco más que un aperitivo o un vicio difícil de dejar, y es que está claro que, una vez que empieces a comer pipas, no podrás parar.
De una forma u otra, las pipas de girasol tienen muy mala prensa. Pero te aseguramos que también son beneficiosas para nuestro organismo, aportando a nuestra salud vitaminas y minerales con los que combatir la fatiga física y mental, reducir el colesterol y prevenir el envejecimiento. Pero como todo, siempre que se haga con moderación.
Beneficios de las pipas de girasol:
– Ricas en fósforo: Las pipas de girasol sin sal son ricas en fósforo que ayuda a mantener los huesos y dientes sanos así como la piel equilibrada ya que ayuda a mantener su PH natural. Al igual que otros frutos secos, por su alto contenido en fósforo, las pipas de girasol ayudan a tener una mayor resistencia física y contribuyen a mejorar las funciones biológicas del cerebro.
– Vitamina B1: Por su alto contenido en vitamina B1, el consumo de pipas de girasol ayuda a superar el estrés y la depresión. Los alimentos ricos en vitamina B1 o tiamina, como son las pipas son muy recomendables en el embarazo o la lactancia así como después de operaciones o durante periodos de convalecencia, cuando hay un mayor desgaste de esta vitamina.
– Vitamina B5: Aparte de las vitaminas B1, las pipas de girasol son ricas en vitamina B5 o ácido pantoténico, que reduce el exceso de colesterol.
– Vitamina B6: Además de poseer vitaminas B1 y B5, las pipas de girasol son beneficiosas para nuestra salud por poseer vitaminas B6, vitamina recomendable en casos de diabetes, de