Si te gustaría que tu futuro bebé comiera de todo, primero tienes que hacerlo tú. ¿Por qué? Porque durante el embarazo podrás despertar el apetito de tu bebé. Está comprobado que la dieta de la madre influye en el gusto de los niños por ciertos alimentos, y que además, mientras están en el útero pueden reconocer sabores, con lo que, quizás, al crecer serán capaces de recordar y preferir aquellos alimentos que consumió su madre durante el embarazo. ¿Quieres que tu hijo coma pescado o brócoli? Cómelos tú durante el embarazo.
Para afirmar esta teoría de que tu bebé descubre sabores en el útero, tenemos que recordar que, un gran porcentaje del sentido del gusto, está determinado por el olfato. Por este motivo, cuando estamos resfriados nos cuesta más reconocer los sabores, ya que nuestra nariz se encuentra congestionada. Siguiendo esta teoría, y para demostrar que el bebé puede descubrir sabores cuando se encuentra dentro del útero.